Falto de espíritu, altivo y pío de alma caminé la costanera.
En algún momento me dijiste que todos esos bichos ya no estaban en la ciudad.
Como olvidarte, agresiva y altanera.
Ahora ya entiendo la cuestión con toda verdad.
(pd. los murciélagos están todos muertos… fijate en las escaleras de los silos)
Cómo me atreví a caminar sintiéndome tan bajo,
aplastado, […]