Visto y considerado que les pedí que escribiesen algo lindo, productivo, constructivo, siquiera bien escrito, y como fallaron en eso, todos menos una persona y ella sabe quien es, simplemente me cansé. Ni siquiera les pedí que no escribiesen boludeces. Les pedí que escribiesen algo sobre el blog, no sobre mi vida o mis hábitos, etc. No me quiero comparar con un escritor famoso, pero yo no creo que alguien criticase a Wilde hoy por hoy simplemente por el hecho que era homosexual declarado, o a Marx, simplemente por que el tipo vivió en la casa de Engels por que mientras estuvo vivo, ni mantuvo a su familia. Ni siquiera a Burroughs por el hecho que vivió de un fideicomiso de 800 dólares que le dejaron sus papás hasta que cumplió 45, sin haberse gastado en buscar un trabajo para mantenerse y viviendo gastándosela en heroína y cervezas. Que si yo vivo con mamá, que la sucia Bella Vista, que si estoy de vacaciones… quería recibir otra cosa. Si.. bueno.. un “flaco, lo que escribís es una mierda”, o “sos demasiado negativo o muy redundante”. Me cansé de esperar cosas buenas y en fin, desde ahora se acaban los comentarios. O sea, veo que no pude levantar el nivel de los escritos que largo Dios sabe cuando, de vez en cuando, y debo estar condenado a la miseria. Mierda, mejor no se me ocurre publicar un libro. Me imagino que todos ustedes, críticos literatos, escritores de mil y un libros, profetas del verso y la prosa, se cansaron de publicar buenas obras. Borges se debe haber cegado a sí mismo para resistir a la tentación de leer a sus textos.
Ahora van a tener tiempo para dejar de escribir nimiedades y van a ahorrarse el esfuerzo quedándose con el pito en la mano. No se preocupen, puedo vivir sin los sinfines de tributos que me dedican cada día. Soy un chico grande, quizá no tan grande, no importa. Sin embargo me preocupa qué va a pasar con la vida de ustedes, por que la mano viene difícil y cuanto más bruto se hace uno, más díficil se vuelve la cosa. Y siendo yo un tipo bruto que escribe en su blog, no sé que progreso esperar de las personas que critican a un bruto, maricón, sea cual sea la calificación hacia lo que escriba en el blog. O sea, realmente siento empatía con ustedes, ínfimos soretitos, resentidos. Ahora pueden hacer cosas más productivas, como pelarse una banana, ir a criticar la gramática del programa de Dolina, o en el mejor de los casos, suicidarse por el bien del resto del planeta. No se preocupen, yo quizá lo haga mas tarde, tambien, pero sólo para no dejarlos solos. Por si acaso, no publiquen en un blog: odiaría que alguien los critique a ustedes, siendo gente tan inteligente, culta, bien formada y bien direccionada. ¡Qué calamidad, que desastre, che!
Por lo pronto, mientras no hayan comentarios, voy a volver a tener la libertad de publicar lo que se me cante. Me había olvidado que los mejores comentarios en realidad me llegaron fuera del ámbito de lo que el blog, o al menos, antes que a este blog y el comment board. Ahora voy a poner tooooodas mis mariconadas, para que ustedes se sienten en casa y se muerdan las uñas, o mejor aún, me busquen en la calle para golpearme. Por que eso también, voy a mirar paranoicamente tras mis espaldas cuando camino por la calle para que “el KPO” (sigh) no me golpee. Voy a encerrarme en mi pequeñita burbuja de pedos a soñar con los ángeles y su sexo (sigh) mientras mami me financia las horas perdidas.
